3/04/2005

The main question: Is a CEO a professional?

Recientemente leí un artículo en “Working Knowledge” de HBS que tenía por título Is business management a profession?

Excelente pregunta.

Allí se contrastaban las clásicas y antiguas profesiones universitarias como Medicina y Derecho, con el ejercicio de la gestión empresarial, a partir de la selección de 4 criterios característicos de las primeras que me parecieron muy interesantes. En cada profesión existe:

.Un cuerpo común de conocimientos que reposa (en según qué profesiones nunca mejor dicho), en una ampliamente aceptada y desarrollada base teórica.

.Un sistema de certificación que acredita a cada profesional como poseedor (en según que profesiones sería más bien “atesorador” o “atenazador”) de dicho conocimiento, lo que le permite ponerlo en práctica.

.Un código ético donde se sancionan ciertas desviaciones profesionales.

.Y por último, un compromiso para usar ese conocimiento especializado para el bien público, renunciando a las metas de máximo provecho personal y monopolio del poder.

Los autores se preguntaban si la gestión empresarial podría corresponder a estos criterios, y de allí que señalaran las razones por las cuales (al menos en EEUU, que es donde se basa el estudio) la sociedad haya perdido confianza en los líderes de las empresas, tanto como en los políticos de Washington. No han sido pocos los escándalos empresariales de los últimos 5 años y sus consecuentes –por qué no y aquí también- daños colaterales.

En realidad el artículo despierta muchas preguntas. La semana pasada lo comenté con Julian (quien es profesor y sociólogo de la Universidad de Cambridge) y él puso en duda que una empresa (en EEUU principalmente) tenga en cuenta el bien público antes que el beneficio de sus shareholders, más aún por el hecho cierto de que justamente la administración Bush ha quitado cualquier regulación que pueda ir en contra del objetivo último de la empresa estadounidense: el interés privado, el máximo provecho particular. Liberalismo sin cuidado.

Lo que me ronda por la cabeza ahora es: ¿Cómo se autorregulará este sistema capitalista sin que termine auto minándose? ¿Los famosos CEOs tienen que actuar como “profesionales” en el sentido que se describe en el artículo de HBS (donde se espera que tomen decisiones basadas en un conocimiento especializado y métodos rigurosos en consideración del bienestar de los otros), o no necesariamente?

¿El capitalismo norteamericano es sólo un juego de casino (no es lo único que me lo parece, el sistema electoral también, pero esa es otra discusión) donde sólo se apuesta por las ganancias en la bolsa y dónde para saber jugar hay que saber especular? ¿Es el manager un mercenario (haz lo que tengas que hacer por dinero)?

Y finalmente: ¿dado que los activos de las empresas son cada vez más intangibles, de qué son propietarios los accionistas?

No son preguntas retóricas, aunque lo parezcan. Veremos cómo llegar a posibles respuestas.